El transporte en España es responsable de aproximadamente el 25% de las emisiones totales de gases de efecto invernadero. Un dato que deja en evidencia la importancia de la colaboración entre diferentes niveles de gobierno, en alianza con el sector privado y la participación ciudadana, a la hora de implementar estrategias de movilidad sostenible de manera efectiva y avanzar hacia un futuro más verde y conectado.
En este sentido, Arriva ha logrado un hito importante en Alcorcón al convertir su flota de transporte urbano en completamente eléctrica, un proyecto que comenzó hace más de un año y que ha transformado la experiencia de transporte en la ciudad. Estos cambios no solo mejoran la calidad del aire, al reducir las emisiones de CO2, sino que también impulsan un servicio más silencioso y eficiente para los residentes y una experiencia mejorada tanto para el usuario como para el conductor.
“La gestión de proyectos de descarbonización es compleja y requiere una planificación meticulosa y una colaboración estrecha entre todas las partes involucradas, ya que cada aspecto, desde la tecnología y la infraestructura hasta el mantenimiento y la ingeniería, es crucial para el éxito del proyecto y tiene un impacto directo en el TCO” comentaba Carlos Varela, director de Arriva Galicia, durante su intervención. “A pesar de la mayor inversión inicial que supone la adquisición de nuevos vehículos eléctricos y su infraestructura correspondiente, los costes asociados a mantenimiento e ingeniería a lo largo de la vida útil del vehículo es considerablemente menor, contribuyendo así a la sostenibilidad económica del proyecto”.
La ciudad de A Coruña será la anfitriona del próximo y último encuentro de la iniciativa, en septiembre, donde continuará el diálogo iniciado en Santiago de Compostela y la ciudad olívica.